SAL DEL HIMALAYA: EN LA DECORACIÓN DE NUESTROS HOGARES Y EN NUESTRA COMIDA

Las lámpara de sal del Himalaya, además de ser un objeto decorativo único, tiene varios beneficios para nosotros y nuestro entorno.

Al enceder la lámpara, el calor que se genera en su interior hace que el aire se purifique neutralizando los iones nocivos emitidos por televisores, móviles, ordenadores y demás electrodomésticos.

Estas lámparas emiten iones negativos durante las 24 horas del día, lo que permite equilibrar nuestro entorno. Estos iones negativos se adhieren a los positivos, que son los que han perdido sus moléculas de Oxígeno, y de ésta manera los neutralizan y así purifican el aire del ambiente donde se encuentra la lámpara. Los iones entran a nuestro organismo a través de la respiración, permitiéndonos una mayor absorción de Oxígeno.

lamparas_de_sal_kurmaTener encendida la mayor cantidad de horas una lámpara de sal, ayuda a evitar dolores de cabeza y jaquecas, disminuye alergias y ataques de asma.

Otra manera excelente de aprovechar los beneficios de este regalo de la naturaleza, es sustituyendo la sale de mesa convencional por la SAL DEL HIMALAYA molida o en escamas, ya que ésta, cuando llega a nuestras manos, posee los 84 minerales y elementos naturales que nuestro cuerpo necesita.

La gran mayoría de sales pierden todas las propiedades al ser refinadas, manteniendo solamente cloro, sodio y en algunos casos yodo.

En cambio, la sal del Himalaya, procedente generealmente de las montañas de Pakistán, está formada por Cloruro de Sodio, Calcio, Potasio, Magnesio, Manganeso, Fluor, Yodo, Zinc, Cromo, Cobalto; Cobre, Oro y Hierro, éste último elemento es el encargado de dotar a esta sal de su color rosa característico.

Condimentar nuestras comidas con esta sal ayudar a mantener equilibrado el nivel de agua en nuestro cuerpo, reduce los calambres musculares, regula la presión arterial y mejora la circulación.

Disfrutemos y cuidémosnos con lo que la MADRE NATURALEZA nos regala!

Gracias por estar ahí.

Te saludo desde el corazón.

Namaste

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